Sensible & Rojez
La sensibilidad y la irritación de la piel son problemas comunes que pueden afectar a personas de diferentes tipos de piel. La piel sensible es más propensa a reacciones adversas debido a diversos factores, como la genética, el clima, el estrés, los productos de cuidado de la piel agresivos, los alérgenos o irritantes ambientales.
Algunas características de la piel sensible incluyen:
Sensación de picor, ardor o tirantez: Las personas con piel sensible a menudo experimentan sensaciones incómodas como picor, ardor o tirantez en respuesta a ciertos desencadenantes, como cambios en la temperatura, productos de cuidado de la piel o exposición a factores ambientales.
Enrojecimiento: La piel sensible tiende a enrojecerse con facilidad. Incluso pequeños estímulos, como tocar la piel o aplicar productos, pueden provocar enrojecimiento temporal o persistente.
Reacciones alérgicas: La piel sensible puede ser más propensa a reacciones alérgicas a ciertos ingredientes o productos de cuidado de la piel. Estas reacciones pueden manifestarse como erupciones cutáneas, inflamación o hinchazón.